Poliéster

La formación de poliéster es una técnica de fabricación que permite obtener un nuevo producto a partir de una resina sintética. Combinado con la fibra de vidrio, se obtiene un producto duro y robusto, pero aún relativamente ligero.

Durante la producción, las esteras de resina y fibra de vidrio se colocan por capas en el molde. La resina proporciona dureza y junto con la fibra de vidrio da al producto final resistencia y dureza.

El poliéster no es un plástico sino una resina que se endurece mediante un proceso químico. El poliéster no se derrite, no es sensible a los solventes y no se inflama con facilidad. A menudo, la malla de fibra de vidrio se utiliza como relleno y da mayor firmeza. Si la resina de poliéster se aplica sobre un molde se obtiene una superficie interior lisa y si se aplica dentro del molde se obtiene un exterior liso.

Los moldes son fáciles de fabricar: generalmente son una reproducción de poliéster extra gruesa de un prototipo en madera. En el caso de piezas sueltas, la madera se cubre con esteras de fibra de vidrio y poliéster. Se obtiene un producto final resistente a ácidos y aceites, impermeable y prácticamente no inflamable.